Dos son las vías por las que la devoción a la Virgen de Guadalupe enraíza entre los sevillanos, una es por su vecindad con Extremadura y otra la Carrera de Indias. También son dos los caminos por los que el peregrino llega al santuario de Santa María de Guadalupe, ambas aprovechan antiguas vías romanas y cañadas pecuarias. La Vía Augusta entra en la provincia de Sevilla, desde Cádiz, bordeando las marismas del Bajo Guadalquivir, siendo El Cuervo de Sevilla la primera localidad sevillana. Desde la capital hispalense, el peregrino a Guadalupe puede optar por trasponer Sierra Morena siguiendo la Vía de la Plata o por el Camino Colombino.